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miércoles, 19 de septiembre de 2012

Las Nectarinas

    El nectarino es un árbol de la familia de las rosáceas. Es en realidad un melocotonero mutado de manera natural. No es cierto que sea una variedad producida por la intervención humana (hay quien piensa que es un híbrido entre ciruelo y melocotón), sino que es un melocotonero cuyo fruto ha perdido los pelillos típicos del melocotón (tomentosidad), pero las propiedades son casi idénticas (las nectarinas tienen algo más de vitamina A). Sin embargo se han producido multiples variedades fruto de polinizaciones cruzadas.
    Procedente de China, donde la consideraban "el néctar de los dioses", lo conocían los griegos y romanos aunque hasta el siglo XVII no aparecen referencias de su cultivo en Europa. Los españoles las llevaron a América, donde desde el siglo XVIII volvieron a adquirir importancia, impulsadas por las variedades cultivadas en California.
    El nectarino es muy reistente a los fríos del invierno (hasta -7ºC),y soporta el calor y la sequedad del verano. La floración (que es anterior al brotado de hojas) es sobre mediados de febrero. Aquí mi nectarino de una variedad llamada Perica.

   Al igual que los melocotoneros, son muy vulnerables a una enfermedad llamada lepra (Taphrina deformas), que abolla las hojas y el fruto. Se debe curar antes de la floración con un fungicida y repetir la cura 10 días después.
    Aun así es probable que en el crecimiento de las hojas vuelva a reproducirse. Yo lo que suelo hacer es quitar las hojas afectadas a mano para no volver a curar, pues en esas fechas la fruta ya está más grande y no quiero cargarla de productos.
    Cuando los frutos tienen un centímetro ya habrán tirado dodas las flores no fecundadas, pero seguirán siendo muchos, con lo que habrá que entresacar. Se eliminarán todos los frutos, dejando sólo uno cada 7-8 cm.
    En la foto una rama afectada con lepra.

    A finales de mayo podremos empezar a comer fruta. Es junto con las cerezas la fruta más temprana que tengo y están deliciosas. Tras el periodo de fructificación es bueno realizar una poda en verde eliminando los chupones y las ramas excesivamente lignificadas. A la caída de la hoja se terminará la poda de formación despuntado las ramas largas y eliminando parte de las ramas que han fructificado, así como las mal situadas o cruzadas. Se debe eliminar entre un 50 y un 70% de las ramas para que la fructificación al año siguiente sea óptima.

    En cuanto a la fruta, hay quien le gusta comerla cuando la pulpa aún está un poco dura. Cuando las cogemos muy maduras -que es cuando más ricas están-, son tan tiernas que se chafan con facilidad, soltando gran candidad de néctar que suele estropear muy rápidamente la fruta que está en contacto. La ventaja que tiene sobre el melocotón es que se puede comer con piel al ser lisa y agradable al paladar, lo que nos aporta un porcentaje extra de fibra. Además la pulpa contiene básicamente azúcar, agua, vitaminas y minerales, lo que la hace una fruta altamente refrescante.
    Además de como fruta fresca, son deliciosas las mermeladas y formando parte de las macedonias de fruta, pues le da un ligero sabor ácido muy agradable.
    No he podido resistirme y le he pegado un muerdo a una. Me sirve para que se vea la piel (superfina) la pulpa (carnosa y tierna) y el hueso (completamente despegada la pulpa).

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